Aquél
verano los primos se quedaron todos juntos a pasarlo en la vieja casa de campo
del abuelo.
–“Solo serán dos meses”- dijo mamá.
Lo
cierto es que a todos les parecía muy bien, incluso hicieron sus maletas y
mochilas con gran rapidez y, puestos de acuerdo, metieron palas, rastrillos y
cubos como si la casa estuviera en la playa, que no estaba, que ya digo que
estaba en el campo.
Llegaron
así encantados y bajaron corriendo del coche grandote de papá, y apenas si se
despidieron pues querían llegar cuanto antes a sus habitaciones, que estaban en
el piso más alto de la casa donde el abuelo había colocado camas para todos,
dijo….
Y
sí, allí estaban las seis camas cada una con una colcha de un color distinto:
azul, blanca, verde, rosa, amarilla y naranja…. Al fondo de la habitación había
una escalera que subía hasta el techo y ya no se veía nada, por eso miraron al
techo y cada uno se preguntaba para sí hasta donde llegaría dicha escalera…………….
Como
era ya tarde se pusieron sus pijamas y se metieron en las camas, cada uno en el
color que más les gustaba, se durmieron y empezaron a soñar…….
Y
fue entonces cuando sucedió que para cada uno la escalera llevaba a un sitio
diferente, a jugar, a cantar, a tocar la guitarra súper-bien, a saltar, a hacer
fotos, a montar en bici sin ruedines, a hacer problemas de mates en un
pis-pas,……….….incluso para tirarse de cabeza a la piscina y hacer largos
interminables sin cansarse ni nada!!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario