Los cuentos de mis nietos

Este fin de semana me quedé con mis nietos, y como algo teníamos que hacer para entretenernos, les propuse un concurso de cuentos... será pasión de abuela pero no pude evitar las sonrisas al leerlos. Aquí os dejo algunos de ellos...

Título: El Brujo
Autor: 5 años
Érase una vez unos niños que estaban en una casa, pero un día se perdieron en el bosque y se encontraron una casa embrujada y pasaron la noche dentro, donde vivía un brujo que les encerró en su casa. Pero el padre les rescató y se fueron a su casa.
Y aunque estaban manchados de barro, la madre les abrazó y luego les llevó a la cama y les acostó.
FIN

 

Título: Un niño guay

Autor: Ángel, 6 años
Había una vez un niño que se creía  guay. Tenía 24 hermanos. Un día en su camioneta se fue a casa de sus primos Mark, Ángel, Rubi, Flipen, y como hacían skateboard él les dijo “no sabéis hacer skateboard”, yo os demostraré como hacerlo. Él se lanzó con el skateboard  y …. acabó contra la pared y con el tobillo roto.
Luego la tarde llena de sol se la pasó en el coche-caravana. Luego, al día siguiente, vuelve a casa de sus primos en su coche caravana y van al futbol herido y Rubi acabó también herido en urgencias. Y el pensó ¿para qué hay que ser chulito si se puede tener tu propia vida?
FIN

 

Título: El Castillo de dentro del cuerpo

Autor: 7 años
Érase una vez una niña que encontró un mago que la metió dentro de un cuerpo, entonces….
¡vio que estaba en el corazón de ese cuerpo y que navegaba por las venas!
Así a través de las venas, navegando por la sangre, llegó a los huesos, hasta que llegó y encontró un gran castillo de huesos, sangre y aire; se acercó a la puerta y llamó al timbre. La verdad es que la niña tenía miedo pero se alegró de ver a la reina y preguntó: “¿Quieres venir conmigo a la naturaleza? La reina dijo que si, pero que antes preguntaría al rey si le parecía bien……..
FIN

 

Título: La mascota
Autor: 7 años
Mi tío que siempre está de viaje, me ha traído una mascota que se llama X30. No sé lo que es, parecía un loro y hablaba. Decía: dame patatas, quiero comer! Y también parecía un vampiro con los colmillos que tenía, así es que le compré una correa roja y azul. Pero una mañana me mordió. Le perdoné pero, eso si, estuvo una mañana castigado en el salón.
Luego la mascota cogió 924 billetes y los metió en la correa que tenía bolsillos y todo. Después fue a pegar un salto y lanzarse por la ventana, pero le alcancé con la mano sujetándole fuerte y le llevé a una celda y lo devolví al mundo lejano de donde la trajo mi tío.
FIN

 

Título: La patata pocha

Autor: 7 años
Érase una vez una patata que, como todas las patatas era muy, pero que muy alegre. Sabéis vosotros como se llama? Pues se llama María. ¿y sabéis porque era tan alegre? Porque cada día, cuando la iban a pelar se tiraba al suelo, la lavaban, la secaban y la dejaban para otro día. Total todos los días hacía lo mismo: el lunes, el martes, el miércoles, el jueves el viernes, el sábado y hasta el domingo.
Un domingo temprano, a las 2 de la mañana, María se quedó dormida. Entonces, cuando ya eran las 12 de la mañana, María seguía dormida. Entonces Jaime (el dueño de las patatas) la peló. Entonces Jaime comprobó que la pobre patata tenía un gusano dentro y la tiró.
Y María cuando despertó notó que algo le hacía cosquillas… ¡era el gusano Pepe! Y María y Pepe se hicieron muy pero que muy amigos………..
Y colorín colorado este cuento se ha acabado
 

Título: Pequeño quiere ser grande
Autor: 8 años
Érase una vez una señora y un señor que estaban casados. La señora se llamaba Juany y el señor se llamaba Antonio. Entonces un día Juany tuvo un bebé, al que le llamaron Luis, el niño se reía. Un año después el niño empezó a hablar y pensó que quería ser como sus padres, que ya eran mayores. Un día empezó a andar y empezó a hacer gamberradas.
Cuando era su cumpleaños a las 5 de la mañana, cogió la tarta y la tiró. Un día se quejó: ¡Mamá, Papá: quiero ser grande! Y sus padres le dijeron: pues no haber tirado la nevera, la tarta…… ¡porque ahora nos hemos quedado sin comida!!! El niño se quedó fastidiado. El padre le explicó: y además creces con los años Luis.
Pasaron años y años y años y Luis se hizo mayor y grande. Cuando Luis tenía 14 años se enamoró de una chica llamada Laura y le enseñó las fotos de cuando era pequeño. Laura dijo: que mono! (entre risas).
Y tuvieron hijos con 25 años. Se llamaron Pablo y Claudia.
Y así Luis entendió que se crecía alimentándose bien y por los años eras grande o pequeño.
FIN.

 

Título: El niño que descubrió el espacio (Colección del espacio)
Autor: 9 años
Había una vez un niño que se encontró una nave que vino de Marte. El creé que viene del cielo. No sabe cómo funciona.
Un día decidió usarla, así es que dio a un botón y la nave despegó. Llegó al espacio.
El niño, que por cierto no os he dicho como se llama, pues se llama Ramón, vio algo negro con puntitos blancos ¡era el espacio! ¡qué guay!.
Ramón vio su planeta (Tierra), vio el planeta rojo (Marte), vio el planeta más pequeño (Plutón) vio a Mercurio el que está más cerca del Sol, y vio a Venus, a Júpiter el planeta más grande, Saturno el de los anillos; Urano y también a Neptuno y ¡hasta aterrizó en la Luna! (se puso el traje de astronauta) Como era tarde Ramón le dio a otro botón y se fue a casa. Se lo contó a su padre que se llamaba Juan.
Al día siguiente se lo contó a su amigo Carlos e hicieron un acuerdo: los dos de mayores serían astronautas.
FIN

 

Título: Juego mortal

Autor: 10 años
Guillermo estaba concentrado en su juego de la PSP. Se lo habían regalado hace unos días, pero hasta hoy, que era sábado, no le habían dejado jugar. Era necesario que antes estudiara e hiciera todos sus deberes; sus padres se lo habían dicho:
-“Guillermo hasta el sábado ni sueñes con jugar con la PSP”-
Llegó el sábado, Guillermo probó el juego, era súper-difícil, para mayores de dieciséis y Guillermo apenas tenía nueve.
Había que atravesar un largo pasillo, subir más de mil escalones de una escalera de caracol y conseguir llegar hasta una puerta que estaba protegida por un inmenso transformer, el cual tenía unas manos como alicates, y los ojos apenas si se podían ver pues estaban tapados por unas conchas enormes, que se abrían y cerraban..
Guillermo movía los dedos arriba y abajo, triángulo, equis , cuadrilátero….hasta que se lió y…..zas! a empezar otra vez, de nuevo iniciaba el juego: triángulo, arriba, equis, abajo, derecha y…..se fue la luz!!!!. La PSP estaba con el cargador enchufado a la red, notó un calambre en los dedos……
Todo estaba oscuro alrededor, no había nada de luz. Metió la mano en su bolsillo y de allí sacó una linterna; la encendió y nada más encenderla  enfocó al transformer que se estaba acercando amenazadoramente. Guillermo sin apenas pensarlo dos veces se abalanzó con todas sus fuerzas contra el transformer, quien al caer abrió la puerta……
Guillermo abrió los ojos y vio el tesoro. ….. notó de repente en su hombro derecho  una mano conocida, la de su madre, y se oía “Guillermo! Guillermo, estas sudando hijo, te habías dormido verdad?”  Y Guillermo le dijo: mamá no me volveré a comprar un juego que no sea de mi edad…….
FIN