martes, 12 de junio de 2018

Tana y Tono y las hojas de los árboles


En casa de Tana y Tono hay un jardín lleno de árboles que cuando llega el otoño se quedan sin hojas.

-“¿Por qué los arboles parecen desnudos papá? Se han quedado sin hojas y dan mucha penita...”- dijo Tana con un tono lastimero, mientras Tono asentía con la cabeza demostrando de ese modo que estaba totalmente de acuerdo con ella.

Entonces papá no tuvo otro remedio que explicar a los hermanos cómo funcionan las hojas, para que sirven y cuantos tipos de hojas hay, o al menos pudo enseñarles las hojas que había en su jardín.

Así es que cogiéndoles de la manita los llevó de árbol en árbol:

Primero fue un “sauce llorón”:

-“Mirad este árbol se llama llorón, sauce llorón, porque parece que las ramas caen así como si lloraran, tienen un montón de hojas y todas se caen”-

-“Este otro se llama Pino Piñonero, eso por dar piñas, que por cierto vienen muy bien para encender la chimenea en invierno, y mirad las piñas sí se caen pero las hojas no se caen, por eso se llaman árboles de hoja perenne”-

-“AHHHH”- dijeron los niños.

-“¿Y estos tan altos como se llaman?”- preguntó Tono

--“Estos tan altos se llaman Populos alba”- los ojos de los niños se quedaron abiertos, como platos: -“¿cómo?”- dijeron a coro –“bueno también se llaman álamos, o chopos...”-

-“¡Ah!”- dijeron aliviados, eso sí sabían lo que eran

Los niños seguían mirando a su padre fijamente, querían saber más de los álamos, así es que papá no tuvo otro remedio que contarles que son árboles de hojas caducas, o sea que se caen, que crecen muy rápido y que llegan a tener treinta metros de altura..... ah y también que en España hay muchos............

¡Qué bien ya sabían más cosas!