viernes, 13 de septiembre de 2013

El Jardín de Infancia: la primera marcha

Este mes mi nieto menor ha iniciado su primera marcha.

Con su pequeña mochila de vivos colores y con un “Noddy” ojiplático estampado en ella, el pobre pequeño avanzaba feliz en brazos de su madre. Entra en la guardería y mira a derecha e izquierda y esboza una sonrisa (es un niño guapísimo, alegre y que sonríe sin que tengas que hacer ningún esfuerzo), pero debe intuir algo pues muy serio, agarra con fuerza la camisa (ideal) de su madre y no hay forma de dejarle en el suelo. Ni juguetito de apego ni el cochecito que tanto le gusta ni el ojiplático….no quiere saber nada, solo quiere la camisa de su madre….

Su madre opta por sentarse con él y ambos comienzan a jugar.

Con esta manía que tenemos en la familia de explicar todo, comienza a explicarle (ayer cumplió su primer año) que debe quedarse contento, jugar con sus compañeros y aprender todo lo que pueda, que ella tiene que trabajar pero que vendrá enseguida a buscarlo para volver a casa… pero no hay forma, sigue con la camisa, ideal ya digo, agarrada fuerte fuerte….. al fin en un descuido su madre decide levantarse y diciéndole adiós, faltaría más, se levanta y sale por la puerta…… los llantos se oían a kilómetros de distancia.

Bueno la verdad es que el disgusto le duró poco, según dicen las profes, que enseguida comenzó a jugar y a mirar atentamente, sin sonreír mucho que digamos, a todos y todo lo que le rodeaba.

Como los primeros días dicen eso del periodo de adaptación, a las dos horas y media ya estaba su madre en la puerta del cole abrazando a su hijo como si volviera de la guerra…….. el pequeño con restos de lágrimas en los ojos, parecía contarle  “lo he conseguido!!!!!”

2 comentarios:

  1. Qué bonito! La primera de tantas batallas por la autonomía del hombre que será...Un gran hombre ¡seguro!

    ResponderEliminar
  2. UFF como me ha recordado el primer día de mi hijo menor!!!!

    ResponderEliminar